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miércoles, 22 de abril de 2009
La partida
Todo se había perdido, ya nada podían hacer. Aquél fatídico Martes las calles de Constantinopla amanecían tristes, desesperadas, llorando la pérdida de la corona romana que había llevado mil años.
Sofía e Irene estaban ya fuera de la perdida ciudad, en la que el Sultán había entrado.
La noche de la batalla, las dos fueron conducidas por diez soldados vestidos de paisanos y dos sacerdotes por unos túneles subterráneos que comunicaban el palacio con el puerto. Allí se encontraban esperando a que todo se calmase para poder partir en la nave que, como había dispuesto el Emperador las llevaría a Venecia.
Irene se había negado en rotundo a partir de su amada ciudad, pero comprendió que ahora la Corona estaba en sus manos y que debía salvarla. Con su padre había muerto el Imperio, pero ella ahora era la depositaria de la dignidad imperial y eso no se debía perder.Allí permanecieron dos días, al final de los mismos, las recogió la referida embarcación a las tres de la madrugada.
Sofía e Irene estaban ya fuera de la perdida ciudad, en la que el Sultán había entrado.
La noche de la batalla, las dos fueron conducidas por diez soldados vestidos de paisanos y dos sacerdotes por unos túneles subterráneos que comunicaban el palacio con el puerto. Allí se encontraban esperando a que todo se calmase para poder partir en la nave que, como había dispuesto el Emperador las llevaría a Venecia.
Irene se había negado en rotundo a partir de su amada ciudad, pero comprendió que ahora la Corona estaba en sus manos y que debía salvarla. Con su padre había muerto el Imperio, pero ella ahora era la depositaria de la dignidad imperial y eso no se debía perder.Allí permanecieron dos días, al final de los mismos, las recogió la referida embarcación a las tres de la madrugada.
jueves, 16 de abril de 2009
miércoles, 15 de abril de 2009
El tiempo sin tiempo.
Si hay algo que nos conmueve y atrae de la Semana Santa, es sin duda que es todo un viaje en el tiempo. Siempre vamos a ver las cofradías en el mismo lugar, a la misma hora, esperamos la misma marcha, el mismo paso, la misma saeta....
¿Por qué? El hombre tiene necesidad de permanecer, por eso se tiene hijos a los que se les enseñan las cosas que hacemos, y por eso además necesitamos reencontrarnos con nosotros mismos. No podemos volver hacia atrás, sin embargo, podemos sentir de nuevo cada año en semana santa aquéllo que nos ha conmovido antes, que nos ha hecho vivrar de emoción o que nos llegó al corazón directamente.
Cada año nos hacemos un año más viejos, sin embargo, el llegar la semana santa volvemos a ese tiempo sin tiempo, en el que nada importa, solo el hecho de vivir lo que llega....
Un año más, hemos vuelto a ser niños que querían globos, chicos que buscaban con su mano otra para sentir su calor, ojos que se cruzan con otros llenos de amor...... y hemos vuelto a ese punto de partida, efímero en el tiempo, pero duradero en nosotros, que nos hace soñar con otro mediodía a la sombra de un arco color albero.
¿Por qué? El hombre tiene necesidad de permanecer, por eso se tiene hijos a los que se les enseñan las cosas que hacemos, y por eso además necesitamos reencontrarnos con nosotros mismos. No podemos volver hacia atrás, sin embargo, podemos sentir de nuevo cada año en semana santa aquéllo que nos ha conmovido antes, que nos ha hecho vivrar de emoción o que nos llegó al corazón directamente.
Cada año nos hacemos un año más viejos, sin embargo, el llegar la semana santa volvemos a ese tiempo sin tiempo, en el que nada importa, solo el hecho de vivir lo que llega....
Un año más, hemos vuelto a ser niños que querían globos, chicos que buscaban con su mano otra para sentir su calor, ojos que se cruzan con otros llenos de amor...... y hemos vuelto a ese punto de partida, efímero en el tiempo, pero duradero en nosotros, que nos hace soñar con otro mediodía a la sombra de un arco color albero.
El tiempo sin tiempo.
Tras el parón de la Semana Santa, la agencia Rosaria Express, realiza una selección de las fotografías que realizó durante la misma.
Son, como su directora Chayo López las llama, "fotografías anecdóticas", es decir, sin pretensión de ser artísticas, en las que simplemente se muestran imágenes y momentos que por alguna razón han gustado a la autora.
Esperamos que las disfruten.
Son, como su directora Chayo López las llama, "fotografías anecdóticas", es decir, sin pretensión de ser artísticas, en las que simplemente se muestran imágenes y momentos que por alguna razón han gustado a la autora.
Esperamos que las disfruten.
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